Ya sabéis todos que además de ser fan del costumbrismo español del XIX, en especial de Doña Emilia ( os recomiendo “Insolación“ de Emilia Pardo Bazàn) también leo con fervor el HOLA. y tengo mi asking de celebrities “patrias”, que encabeza Tamara Falcó , y que se gana cada día a pulso y ya no os digo desde que he visto La Marquesa en Netflix donde su madre Isabel nos confirma que su Tammy sigue en la edad del pavo y así lo cuenta , sin anestesia, delante de las cámaras y al más puro estilo Preysler a Carolina Herrera , más Carolina que nunca , por cierto.
Después de ver esa escena me han quedado clara varias cosas: La primera que la adolescencia puede ser eterna , como dice algún especialista en el tema , y no solo en nuestras casas de comunes mortales ; La segunda que ser eterna adolescente y marquesa con palacio es otra cosa y tercero que Tammy lo más rebelde que ha hecho en su vida ha sido echarse un novio “pintòn” y juerguista.
Tamara es el prototipo de eterna adolescente , eso sí adolescente “nada rebelde” de las que sigue diciendo mami, no creo que haya llamado “tía“ a la Preysler en la vida, y en cambio si me imagino a Isabel en plan “sargento de hiero” con el esto no se hace , esto no se dice pero Tamara es una hija “redonda”, que diría Pedro Aguado ; De Chaveli no me atrevo a decir lo mismo y es que aún tengo grabadas en mi cabeza sus imagenes con Ricardito Bofill en una playa de no se sabe donde, en las que el le “agarraba una teta” tal cual suena. Por eso defiendo la eterna adolescencia de Tammy , sus mañanas que empiezan a las 12:00 , sus desayunos de Hotel ,su novio “empresario de la noche”…
Y ya te digo Isabel que su pavo tiene pinta de que no se va a acabar nunca.
